lunes, 10 de septiembre de 2012

Consejos para el primer día de clases


Primer día de clases 

Haga una cita para visitar el programa con su hijo antes del primer día.

Ayude a su hijo o hija a hacer una lista de lo que quiere averiguar sobre el programa. Por ejemplo, tal vez quisiera saber los nombres de los maestros, dónde se halla el baño y si se toman siestas durante la clase. Lleve la lista el día de la visita.
Haga arreglos para conocer a los miembros del personal y a los niños, para que su hijo conozca a algunas personas por sus nombres.
Pregunte al personal sobre lo que hace para ayudar a las familias a prepararse para los primeros días de asistencia de un niño. ¿Hacen los maestros visitas al hogar del niño? ¿Se invita a los familiares a quedarse en el aula con el niño durante las primeras semanas? ¿Se permite que el niño traiga objetos familiares como un osito o fotos de la familia y los mantenga cerca?
Después de la visita, converse con su hijo sobre lo que averiguaron. Por ejemplo: ¿encontró el baño? ¿Aprendió los nombres de los maestros?

Planifique de antemano para un primer día sin percances.

Varios días antes de que su hijo comience a asistir, empiece una cuenta regresiva y pídale que ponga marcas en los días de un calendario. Invítelo a ayudarle a recoger las cosas que necesitará llevar a la escuela. Permita que el niño escoja la ropa que va a usar y la comida que llevará para el almuerzo.
Asegúrese que su hijo o hija sabe cómo llegará al programa y a casa; por ejemplo, en coche con usted u otro familiar, en el coche de unos amigos o en un autobús (camión o micro escolar) amarillo.

Forme hábitos sanos para despedirse.

Comience con ritos sencillos de despedida que sean significativos para su familia. Su hijo o hija tal vez quiera que usted la abrace o que le recuerde que ella volverá a casa nuevamente por la tarde. O puede que quiera otro tipo de interacción con usted, como por ejemplo contar un chiste o decidir juntos cuál actividad ella querrá probar primero.
Si su hijo se siente angustiado cuando usted se va, comuníquele que comprende que extrañará a su familia mientras está en la escuela, pero que usted está seguro de que tales sentimientos pasarán y que se sentirá mejor después de un rato.
Si usted acompaña a su hijo o hija hasta el aula, no se vaya NUNCA sin comunicarle que va a irse, aun si sabe que la niña se perturbará cuando usted se vaya. Informe al personal que tiene que irse; ellos podrán consolarla y despertar su interés en alguna actividad.